viernes, 8 de abril de 2016

Hoy he vuelto a meditar. Me encanta cuando el tiempo corre como una cascada electrica de sensaciones. Mi unica atenciin se dirige a mi respiración y solo tengo que centrarme en disfrutar de las sensaciones corporales y mágicas que surgen dentro de mí. He vivido disociada mucho tiempo, enloquecida por la falta de tiempo y disfrute, empeñada en que algo mejor llegaría, sin darme cuenta de que ya estaba conmigo, dentro de mí. Siempre he pensado que la felicidad no llegaba, sin querer verla por mis altas exigencias.
El otro día, me subí allí arriba y me sentí poderosa. Pero no era ninguna de mis interpretaciones estelares, sino que fui yo de verdad. Soy otra. La verdadera Paula, escorpio y llena de energía.
Mis prioridades no son tener pareja o querer triunfar. Quiero cuidarme, quererme y mimar a los que me importan. A los pacientes, a mi familia.
Quizás encuentre mi trabajo donde poder ser igual de feliz que el lunes, y lo feliz que estoy ahora. A veces la vida te enseña cuál es la dirección correcta. Escogí bien el camino, lo he regado a conciencia. Y he obtenido los frutos. Soy una mujer afortunada