martes, 29 de diciembre de 2015

Comienzos felices, trayectos tortuosos, finales esperanzadores. Y vuelta a empezar. Nunca te olvidaré, me acompañas siempre. Aunque haya días jodidos, cada día recuerdo lo que me dirías o cómo sonreirías. Quizás esté distorsionando cómo eras, pero me da igual; guardo cada nota de tí grabada a fuego. Tu olor permanece entre las prendas que he rescatado y tú utilizabas. Lloré cuando se me rompió la gema que me regalaste, que era mi amuleto. Ojalá retroceder al día en que se lo entregaste a mi hermana para mí. Te quiero tanto que duele

lunes, 14 de diciembre de 2015

Te echo de menos todos los días. Desde que me levanto hasta que me acuesto. Quiero volver a escuchar tu voz, ¿dónde nos encontraremos? Te quiero tanto.... Vuelve

sábado, 12 de diciembre de 2015

Verdad verdadera

A veces me para la frialdad de aquellos días, donde todo se reducía a obedecer a una fuerza superior a mí. Todavía contemplo con respeto mi problema y lo que tuve que hacer para salir de allí. Todo lo que fui capaz de hacer por obedecer a unas medidas para mí perfectas, pero nunca visibles. Distorsión corporal y mental; me hallaba sumida en un torbellino de ideas escalofriantes que me hacen sentir pánico de lo que uno puede llegar a ser cuando sufre una enfermedad. Hoy, yendo al trabajo pensaba en todo eso y sentía pena. Por la gente que me vio así, mis malas palabras hacia ellos, mi egoísmo y lo patético que lo encuentro ahora. Nunca pensé que la baja autoestima lleve a una persona a maltratar su organismo y llenarse de alimento para intentar sentirse completo. Ya han pasado seis años, gracias a dios pasó tanto sufrimiento.