sábado, 12 de enero de 2013

Y al despertar, la cabeza me daba vueltas. Comencé a pensar en la noche anterior pero no lograba recordar nada. Traté de estirarme con todas las fuerzas posibles para hacer crujir cada uno de mis huesos, del modo en que siempre me ha gustado.
Me dí la vuelta y quise volver a dormir:
y entonces comprendí que no hacía falta recomponer nada, las cosas suceden y sus partículas permancen en la atmósfera el tiempo que tu quieras, como si con un chasquido lo hicieras desaparecer. Y no por ello hemos de entristecernos, porque una vez imaginaste que sucedió como querías, y esa persona sintió lo mismo que tú.
(Aunque poco a poco el hielo se haya apoderado de vuestras almas)

jueves, 27 de diciembre de 2012



Alargando hasta lo inexistente los vuelcos de corazón. Lamiendo las últimas gotas de miel del tarro. Recogiendo las últimas pizcas de sol. Agotando los parpadeos. Finiquitando el aceite del motor y los latidos. Fumando EL último cigarro fumable.

martes, 18 de diciembre de 2012

no más paréntesis.

Entre corchetes y pendiendo de un hilo.
Nuestro sino se balancea hacia delante y hacia atrás. Se sujeta con unos hilos invisibles agarrados por la valentía.
Creo que los números primos habitan en un mundo donde sueñan con que los corten.
Continúo en la vorágine de nerviosismo y rabia pero tengo buenos momentos. Creo que estoy viendo la superficie.
Quizás deba sentirme orgullosa por ver detrás del caparazón, que hay un mundo que sólo nosotros sentimos.

(y es que a veces no paro de pensar)

Me resulta demasiado difícil comprender el significado de los temores. Muchas veces me imagino que cada uno tiene el suyo y me recorren los escalofríos. Suelo pensar que somos ollas a presión y que al explotar al chocar con la máquina, salen a borbotones. La máquina es el alma, llamemósle aparato que los interpreta. Una vez llegan allí, no hay vía de escape, o mejor dicho, la hay y salen al exterior.
Mi exterior es a través de pequeños comedones en los brazos, fruto de no parar de pensar.  A veces incluso se me cae el pelo. Me aterra imaginar qué será de mí.

jueves, 11 de octubre de 2012

(The End)

Pequeños trazos de una estación sobrevalorada. El verano es una fecha mágica para crecer y volar. Lisboa, el tranvía, la playa, los trenes y la música me han llenado de una manera que no sé transmitir a través de las palabras. Conciertos, magia, amigos y Heineken como protagonistas. Ser vampiros durante una semana, salir de la oscuridad de la noche para toparse con el brillante sol de Portugal. Emoción con Mumford and Sons. Un Robert Smith para mí sola. El barrio alto y su magia.
No podría dejar por el camino la Torre Eiffel, Abesses, el Sena  o el fin de semana fugaz en Paris.
Me gradué, dije adiós a personas importantes para mí, comprendí que el silencio es una maravilla de la naturaleza con la que los humanos se comunican de una manera perfecta, comprendí el significado de la amistad. Me uní más a mi familia, y creo que por fin me deshice de los recuerdos del pasado que me atormentaban.Mi jerarquía de valores ha adquirido una posición totalmente diferente.
Al fin y al cabo, abrí los ojos, POR FIN.













miércoles, 8 de agosto de 2012

Thunder only happens when it's rainning

Quizás no lo suficientemente inspirada y tampoco traigo historias apasionantes para complaceros, queridos lectores.Sin embargo permito que los dedos correteen ligeramente sobre el teclado. Todo se dispone en un espacio-tiempo que es medido por el sonido trepidante del reloj de la cocina. Se me está creando una bola en la garganta de esas que me salen cuando me apetece llorar, pero me averguenza hacerlo precisamente ahora, por eso me oculto entre las paredes de mi habitación, con mi escritorio y las plantas de la ventana. Las he regado esta mañana, llevo haciendolo dos semanas, y eso que me las cargo a todas, no se salva ni una.
Puede que me engañe a mi misma haciendo cosas como si su vocecita me recordara que tengo tareas pendientes.
Te voy a echar de menos. Me he obsesionado con esta habitación, no paro de buscarte por los rincones y aun espero que entres por la puerta y te quites rapidamente los zapatos quejándote por lo cansada que estás.(no sin pedirme un beso que siempre me cuesta darte).
He creado una especie de nueva afición: busco fotografías de habitaciones vacías.
Os dejo con una, así me siento por dentro: vacía.


(Vuelve)



jueves, 24 de mayo de 2012

Y ya que estamos... ¿ por qué no decir la puta verdad?
Pues si, me siento sola.   Estoy sola, pero también nací sola asíque ¿por qué preocuparse tanto?
Las relaciones humanas me aterran porque siento que quiero que me correspondan tal y como trato de corresponderles a ellos.
A lo mejor me compro un gato y le lloro a él.
Ahora si, adiós.